Cómo saber si tienes ansiedad: los síntomas claves para identificarla, según los psicólogos

Preocupación excesiva, sensación de ahogo y problemas para concentrarse son algunos de los indicios que pueden anticipar que se padece ansiedad. 

Se trata del problema de salud mental más frecuente es España que como trastorno afecta al 6,7% de población, según los últimos datos del ministerio de Sanidad. Se da más en mujeres, de forma estable a lo largo de toda la edad adulta y presenta gradiente social, siendo más habitual cuanto menor es la renta.

La ansiedad se define como «una sensación de miedo, inquietud, o pérdida de control antes una situación que nos provoca una amenaza«, aclara a Business Insider España la psicóloga sanitaria Bárbara Zapico.

Es por tanto una emoción natural con la que todo el mundo nace, que ayuda a enfrentar situaciones que se interpretan como amenazantes, matiza Vanesa Fernández, doctora en psicología y profesora en la Universidad Complutense de Madrid.

«Cuando excede determinados parámetros, que son frecuencia, intensidad y duración, se convierte en patológica», explica la especialista a Business Insider España. Es entonces cuando puede decirse que hay un problema de ansiedad.

Aquí aparecería por ejemplo, el trastorno de ansiedad generalizada un estado de alerta y preocupación excesiva que dura por lo menos 6 meses, afecta a la vida cotidiana y puede empeorar si no se trata.

A veces el terror es tan intenso que durante minutos se siente una falta completa de control, no puedes respirar y el dolo en el pecho es tal que incluso lleva a pensar que se está sufriendo un infarto cuando en realidad se trata de un ataque de ansiedad.

¿Qué síntomas tienen la ansiedad?

Cada persona padece ansiedad de manera distinta, pero, según Zapico, hay una «serie de síntomas que son comunes y generalmente compartidos por todos aquellos que tienen problemas con la misma». Estos incluyen:

  • Inquietud o sensación de estar atrapado o con los nervios de punta.
  • Fácilmente fatigado.
  • Dificultad para concentrarse o quedarse con la mente en blanco.
  • Irritabilidad.
  • Tensión muscular.
  • Problemas de sueño —dificultad para dormirse o para continuar durmiendo, o sueño inquieto e insatisfactorio—.

Se manifiesta a través de 3 sistemas de repuesta que son el cognitivo, fisiológico y motor, describe Fernández.

«El primero está relacionado con lo que pasa en nuestra cabeza cuando tenemos ansiedad: aparecen pensamientos negativos, magnificaciones de los peligros, minimización de nuestra capacidad de afrontamiento, además de dificultad para concentrarse, tomar decisiones o memorizar».

Lo segundo tiene que ver con los efectos físicos de este problema mental, «debido a la activación del sistema nervioso autónomo simpatico», explica la psicóloga. Aquí entra un aumento frecuencia cardíaca, de la frecuencia respiratoria, cambios en el ph estomacal o tension muscular, entre otros.

Asimismo estos síntomas pueden acompañarse con movimientos repetitivos, con una tendencia a comer más o menos, a beber alcohol, morderse las uñas además de evitación o escape ante la situación que genera la ansiedad, enumera Fernández. Lo que podría explicar que lleves días posponiendo esa conversación con tu pareja o la reunión que sabes que tienes que proponer a tu jefe.

Cuando la ansiedad se convierte en una situación incapacitante, que afecta a todas las esferas de tu vida, lo más recomendable es acudir a un especialista para que pueda ayudarte a manejarla, coinciden ambas especialistas.

Entre los consejos para controlarla están las técnicas de relajación, que suelen ser «muy efectivas», afirma Zapico. En algunos casos, en necesario el uso de medicamentos, denominados ansiolíticos, para fomentar su control, pero siempre deberá ser prescrito por un psiquiatra, enfatiza Fernández.

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