Uno de los sueños más deseados por parte de muchas personas que han llegado a los 40 años es tener la capacidad de vivir sin trabajar. Es decir, ahorrar lo suficiente como para poder retirarte y olvidarte del mercado laboral.
¿Es esto posible? Es altamente complicado, pero la realidad es que, si se atiende a los números, se puede conseguir. Las cantidades que necesitarás, eso sí, son elevadas.
Pero antes de entrar en materia es fundamental que tengas en cuenta que para conseguir un volumen de ahorro adecuado necesitas seguir los principios más básicos de las finanzas personales: recortar los gastos lo máximo posible, generar ingresos extraordinarios (pasivos), automatizar el ahorro, no gastar más de lo que ingresas, utilizar aplicaciones para controlar el gasto y un largo etcétera.
Una vez que tienes todo esto claro, será más fácil entrar en un hábito de ahorro concreto que pueda hacer que consigas ahorrar para vivir sin trabajar a partir de los 40 años. Eso sí, teniendo en cuenta también tus deudas, para que no pongas en cuestión toda tu libertad financiera. Todo es importante.
¿De qué manera puedes entonces vivir sin trabajar? Ahorrando e invirtiendo. O que te toque la lotería, claro está, lo cual es aún más improbable.
Por tanto, la mejor fórmula para vivir sin trabajar a partir de los 40 años es aprovecharse de los rendimientos que generan la inversión. Hay que echar números. La cantidad de dinero que vas a necesitar para ello dependerá de tu estilo de vida: cuánto más dinero gastes, más dinero necesitarás. No es lo mismo vivir con 1.000 euros al mes que hacerlo con 3.000 euros. Todo esto varía en función de cada perfil.
Es por eso que los conceptos de frugalidad e independencia financiera suelen ir de la mano. Las personas que quieren dejar su trabajo y retirarse siendo jóvenes suelen reducir su nivel de gastos a lo mínimo posible. De esta manera, les será mucho más sencillo hacer la acumulación del capital necesario para cubrir esos gastos mediante una renta.
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Otro de los factores fundamentales es, efectivamente, la rentabilidad obtenida. Cuanto mayor sea el rendimiento que logres con las inversiones que hagas, menor será el dinero que necesites para conseguir esa libertad financiera. El principal inconveniente es que no se puede conseguir un control de este punto. Eso sí, estarás a merced de la marcha de la economía y de los mercados.
El dinero que necesitas tener ahorrado para vivir tranquilamente sin trabajar
Pero, yendo a lo concreto, ¿cuánto dinero se necesita para vivir sin trabajar a partir de los 40 años? Teniendo en cuenta que la rentabilidad histórica del mercado es del 7%, el objetivo de vivir de la bolsa puede parecer más fácil de lo que es en realidad.
El problema es que esa rentabilidad no resta comisiones, que pueden llevarse entre un 1,5% y un 2,5% del beneficio, ni inflación, que restará entre un 1% y un 2% más a la rentabilidad, ni los impuestos, que se comerán cada año entre un 19% y un 23% de la rentabilidad dependiendo de la cantidad que hayas ganado.
Imagínate que necesitas 1.000 euros para vivir o, lo que es lo mismo, 12.000 euros al año. En ese supuesto, centrándose en que inviertes el dinero en un producto con una rentabilidad anual del 6% y asumiendo algo de riesgo –algo que consiguen a largo plazo algunos fondos de inversión– deberías tener ahorrados 200.000 euros.
En cambio, si tus pretensiones van mucho más allá, el ahorro tendría que ser mucho mayor. Si lo que quieres es tener una renta mensual de 3.000 euros (36.000 euros al año) la cosa se complica ciertamente. En este caso, si metes tu dinero en un producto con una rentabilidad anual del 6% y asumiendo algo deberías tener un ahorro de 600.000 euros.
Como ves, altas cantidades que no mucha gente se puede permitir, pero quizá te sirvan para hacerte una composición de lugar de esa realidad.
Asimismo, hay otro obstáculo añadido. Rentabilidad y riesgo están íntimamente relacionados, por lo menos a corto plazo. Si estabas pensando en la gestión pasiva como fórmula para vivir de tus inversiones a corto plazo, deberías pensártelo 2 veces.
La razón es que indexarte hará que tus inversiones dependan literalmente de lo que hace el mercado, que no tiene por qué ser estable. En otras palabras, puedes encontrarte con periodos en los que pierdas dinero, mucho dinero.
Teniendo en cuenta que tus ingresos van a depender de tus inversiones y que los necesitas cada año, puede no ser la mejor idea. Precisamente por eso cuando se habla de generar ingresos recurrentes suele surgir la idea de comprar un piso para alquilar. Eso sí, para hacerlo también necesitarás un buen capital inicial de entrada.