Una de las manías más extendidas en el mundo es la de morderse las uñas. Este hábito que tienen algunos tan poco higiénico puede tener consecuencias para la salud. La doctora Heather Kunen, de Beam Street, ha recomendado dejar de hacerlo.
Algunas personas se muerden las uñas de forma puntual para quitarse algún pico que pueda estar molestándoles. Sin embargo, otras personas lo hacen de forma inconsciente cada dos por tres, lo que puede ser una consecuencia del estrés. Si tu problema es el hecho de que la vida te está superando existen otras formas de solucionarlo avaladas por expertos.
Comerse las uñas, como algunas personas lo llaman, no solo las estropea. También conduce a otros problemas mucho más serios que no se quedan en lo estético. Y si tienes un sistema inmunológico más vulnerable puede llevarte a padecer problemas de salud.
«Las personas que se muerden las uñas contraen resfriados e infecciones gastrointestinales con mayor frecuencia«, ha dicho Nikhil Bhayani, médico de Texas Health Resources, según ha recogido Livestrong.
Morderse las uñas lleva a tu boca una ingente cantidad de gérmenes. La razón es que la zona situada debajo de la uña de un solo dedo alberga cientos de miles de microorganismos. Así lo ha confirmado un estudio publicado en el Journal of Clinical Microbiology en 1988.
A lo largo del día, las manos están en contacto con numerosos objetos, no todos ellos precisamente limpios. Y justo la zona mencionada es la más cálida de toda la mano, es decir, el lugar perfecto para la proliferación de bacterias no deseadas. ¿Por qué crees que aparecen hongos en las uñas?
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Cuando te muerdes las uñas, todos esos gérmenes recogidos pasan directamente a tu boca, aunque eso se multiplica si no te lavas las manos cada vez que lo haces. La entrada de esas bacterias puede hacer que termines enfermando. Además, para tu dentadura también supone un riesgo, propiciando infecciones, roturas y desgaste del esmalte.
Existen informes que han señalado la gran posibilidad de que la mandíbula termine desplazándose en personas propensas a morderse las uñas. El gesto que hace la boca al hacer esta acción no es precisamente correcto.
También, al dirigir estos gérmenes a la boca se puede producir mal aliento. Existen soluciones sencillas para combatir el mal aliento que van desde masticar hierbas frescas a tomar leche. Aunque la mejor solución si eres de los que se muerden las uñas es dejar de hacerlo.
«Cuando ingerimos patógenos peligrosos, corremos el riesgo de contraer infecciones orales y sistémicas», ha dicho Kunen. «El consumo de estos microorganismos podría conducir directa o indirectamente a la halitosis o mal aliento«.
Lo primero que debes hacer para dejar de morderte las uñas es ser consciente que lo haces. Presta atención a los factores que han podido desencadenar este hábito para cambiarlos. También puedes optar por mantener tus manos ocupadas. Si sufres estrés puede ayudarte también a despejarte.
Para los casos más extremos, en los que ninguna solución parece funcionar, existen lacas amargas para las uñas. Cada vez que te lleves la mano a la boca un sabor realmente asqueroso te quitará las ganas de seguir mordiéndote las uñas. Con el paso del tiempo esa manía se quedará en un mal recuerdo del pasado.