Jan y Marie Koza viven, trabajan y viajan por el mundo en una furgoneta Citroën Jumper L3H2 que han reconvertido en una minicasa.
La pareja ha visitado España, Canarias, Portugal, Francia, Bélgica, Países Bajos, Inglaterra, Gales, Irlanda, Escocia, Dinamarca, Noruega y Suecia.
«Pagamos 20.105 euros por ella, incluyendo gastos de matriculación y algunos otros detalles», explica Marie a Business Insider.
La pareja asegura que pudieron realizar el 95% de la transformación ellos mismos, con ayuda para algunas modificaciones electrónicas que no sabían hacer.
La conversión de la furgoneta les costó un total de 38.817 euros y 10 meses en tenerla lista.
- No curarás el burnout durmiendo 8 horas: los 7 tipos de descanso que necesitas para sentirte renovado
- Los factores que definen las prioridades a la hora de actuar
- 6 Lecciones de liderazgo de Brian Niccol, el nuevo CEO de Starbucks
- Conviértete en el mejor creador de contenidos este 2024 y más…
- Un emprendedor crea un asistente de IA para ayudar a vender a los agentes comerciales
- WhatsApp le dice adiós al spam: activa su nueva función y ningún desconocido te volverá a molestar
- Qué pasa si tengo un accidente con el vehículo de empresa
- Steve Jobs tenía muy claro dónde se esconde la verdadera inteligencia humana y no es en la memoria ni en el conocimiento
- TikTok destrona a YouTube: las marcas le coronan rey del vídeo en las redes sociales
- Arabia Saudí se ha embarcado en una misión de alto riesgo: comprar el mundo
- Cómo hacerte una AUTORIDAD (SEO) de marca en el sector
- Hasta 15.000 euros solo por mudarte y trabajar en esta región de España
- 5 claves para mejorar la conciliación entre el trabajo y la vida personal, según dos psicólogas
- Descubre cómo ‘El Cliente’ se volvió tan ‘especialito’ en este nuevo (y satírico) anuncio
- Relevancia, cultura y creatividad: 3 tendencias que son la clave del éxito en el marketing
«El cambio a una camper puede ser mucho más barata, pero no queríamos renunciar a ciertas comodidades y lujos, como la ducha, el inodoro y los acabados de calidad con una buena pintura», afirma Marie.
«Lo anotamos todo porque queríamos dar una imagen lo más realista posible de lo que había supuesto la transformación», añade.
Tanto Jan como Marie son creadores de contenido y blogueros de viajes: comparten sus experiencias de su vida en furgoneta en Instagram y Youtube.
Gastan la mayor parte del dinero en gasolina y comida
En las Islas Canarias, la pareja se gastó 173 euros en gasolina y 870 en comida y provisiones cada mes, según comentan.
En total, afirman que se gastaron 2.621 euros en las islas españolas en «gastos variables», incluyendo peajes y los tickets del ferry.
Sus gastos fijos durante el tiempo que estuvieron allí, como el de servicios públicos, fueron de 299 euros.
En total, gastaron unos 3.000 euros, muy por encima del objetivo de los 1.000 euros al mes que se habían marcado pagar cada uno.
Ambos trabajan como creadores de contenidos de por cuenta propia
A finales de 2017, la pareja decidió centrarse en ganar dinero a través de las redes sociales. Desde entonces, aseguran que trabajan todo el día y todos los días.
Tienen un equipo de gestión que se encarga de cosas como los contratos de colaboración, gracias a lo cual pudieron trabajar algo menos, con una menor presión «financiera y de nuestros seguidores en las redes sociales«.
Afirman que todo lo que ganan lo invierten en sus viajes y en su propio trabajo: gracias a las publicaciones en redes sociales, cada vez tienen más margen para organizar sus viajes.
Según ellos, los factores más importantes para ganar dinero eran las visualizaciones en YouTube y las historias en Instagram.
Además, gracias a las colaboraciones, encargos de foto y vídeo para otras empresas, y su tienda online donde venden productos digitales, tienen unos buenos ingresos.
Otras fuentes de financiación extra proceden de Google AdSense y a las comisiones de los afiliados a productos.
Echan de menos su antigua vida, familia y amigos
La pareja asegura que es difícil no poder ver a los amigos y la familia con regularidad y que les falta una rutina diaria más estructurada.
Explican que gran parte de su tiempo lo ocupan en tareas más banales como lavar los platos, llenar la furgoneta de agua fresca, buscar los lugares para drenar las aguas residuales, poner lavadores, elegir un lugar para acampar cada noche y hacer la compra.
«Cosas así, que si tienes una casa de verdad no consumen tanto tiempo y no piensas demasiado, pero para nosotros requiere de bastante tiempo y a veces terminamos agotados«, afirma Marie.
Los principales aspectos a los que tienen que prestar atención son el agua y la electricidad. Añaden que instalaron paneles solares para reducir gastos.
«Llevamos unos 95 litros de agua que nos dura una semana si no usamos de más, mientras que la electricidad nos dura de 2 a 3 días si los días están nublados».
Es difícil mantenerse al día con cosas como el correo cuando estás en constante movimiento.
«Dependiendo de la importancia de la carta, la enviamos a una dirección registrada o, en casos urgentes, al camping donde nos encontremos en ese momento», explica Marie.
Añaden que tuvieron que gestionar la atención médica mientras estaban de viaje, por lo que contrataron un seguro médico internacional de larga duración, que les permite acudir a las citas médicas en cualquier lugar sin tener que pagar inmensas cantidades.
El plan a largo plazo de la pareja es construirse una casa en Alemania que les sirva como base desde la que continuar sus viajes.
Nathan Rennolds, Lisa Dittrich, Business Insider