Ocultar tus emociones: esa silenciosa cuota de sufrimiento
Lo haces a menudo: ocultar tus emociones. Ahora bien, esta es en realidad una costumbre muy nuestra, la de callar lo que duele, la de embotellar la ansiedad, los miedos y hasta los enfados. Poco a poco este ocultamiento deja de ser funcional para generar bloqueos, y con ellos, colocar alambradasSeguir leyendo


























