La creatividad, emblema femenino de energía, y el poder, insignia de lo masculino, son cualidades del ser humano que pueden balancearse. Te enseñamos de qué manera.
Al igual que el yin y el yang, la dualidad de la energía femenina y masculina es una parte importante para la comprensión de la naturaleza humana. Lejos de limitarse a una identidad de género, estas fuerzas engloban cualidades que todas las personas tienen sin importar su sexo.
El lado femenino está relacionado con la apertura y el sentir, mientras que el masculino se asocia con el hacer y la racionalidad. Te invitamos a aprender cuáles son las características de ambos y cómo armonizarlos cuando se desequilibran.
¿Qué es la energía femenina?
Esta es la capacidad de nutrir y crear mediante el amor. Es la fuerza que mueve la espiritualidad, la pasión, la creatividad y el amor propio. Consiste en una energía vinculada a la intuición, la receptividad y la colaboración.
En algunas culturas y tradiciones orientales, la relacionan con la luna, la tierra y el agua, ya que estos elementos simbolizan fertilidad, crecimiento y fluidez. A través de la parte femenina se puede aceptar la vulnerabilidad y ser compasivo con uno mismo y los demás. Sus principales características son las siguientes:
- Empatía
- Intuición
- Nutrición
- Flexibilidad
- Creatividad
- Cooperación
- Conexión emocional
Dicha energía está relacionada también con los sentimientos y el ser. Es delicada y suave, y puede ser bloqueada por el estrés y la resistencia. Estas son algunas señales de falta de armonía con ella:
- Desconexión emocional.
- Aislamiento y falta de pertenencia.
- Problemas para expresar la propia identidad.
- Dificultades para conectar con otras personas.
- Inconvenientes para mantener un equilibrio entre el autocuidado y el cuidado de los demás.
Energía femenina clara y oscura
Las personas con el lado femenino claro tienden a ser dulces, bienintencionadas y empáticas. Están conectadas de manera muy estrecha con su intuición, con lo divino y la energía general.
Por su parte, la parte oscura está relacionada con la pasión, la creatividad y la sensualidad. Al activarla, las personas tienen más fuerza para transformarse y crecer. Es crucial para afrontar la adversidad.
¿Qué es la energía masculina?
El lado masculino del cuerpo es aquel que representa el poder, la fuerza y la intensidad. Mediante él, una persona puede luchar por sus ideales y ser valiente. Asimismo, le permite tomar decisiones y actuar en consecuencia para alcanzar sus metas.
Se trata de la energía de la acción, el hacer y la lógica. Está orientada a conseguir éxito, resolver situaciones difíciles y competir. No se relaciona con el dominio o el control, sino con la fuerza interior y el impulso de autorrealizarse y conseguir logros. Sus principales características son las siguientes:
- Liderazgo
- Ambición
- Racionalidad
- Competitividad
- Orientación hacia la acción
- Enfoque en la solución de problemas
Pero cuando la parte masculina no es armoniosa, es posible que se presenten las señales que procedemos a listar:
- Insatisfacción laboral
- Problemas para tomar decisiones
- Apatía y desconexión con las metas
- Inseguridad y necesidad de aprobación
- Dificultades para conectar con la lógica
- Falta de dirección o propósito en la vida
Energía masculina clara y oscura
La clara se caracteriza por rasgos como la lógica, la asertividad y la acción. Es fundamental para elegir y enfrentar desafíos. En cambio, la energía masculina oscura está ligada con la imponencia, la competitividad y la confrontación.
Cómo equilibrar la energía femenina y masculina
Los seguidores de esta concepción energética de la vida humana sostienen que para gozar de un mayor bienestar es necesario que ambas energías estén en armonía. A continuación, ofrecemos algunas sugerencias para conseguirlo.
1. Practicar mindfulness
Meditar, hacer yoga y participar en otros entrenamientos donde la atención plena sea central puede favorecer el balance de las dos energías. Esto es posible, ya que el mindfulness conecta el cuerpo con la mente.
2. Hacer arte y deporte
El arte estimula la creatividad, la intuición y la flexibilidad (lado femenino). Mientras que el deporte promueve la competitividad, la fuerza, la orientación a metas (lado masculino). Tales actividades son cruciales para equilibrarlos.
3. Conectar emociones y pensamientos
Al realizar esta conexión, se integra el par de energías, ya que se trabaja en sus cualidades: se fortalece el conocimiento emocional (energía femenina) y se estimula la racionalidad (energía masculina). Para integrar las emociones con los pensamientos, es necesario identificarlas y luego reflexionar sobre ellas.
4. Desarrollar un hobby diario
Los hobbies permiten un mayor enlace con el lado emocional e intuitivo del ser humano. Cuando la persona se compromete a realizarlos a diario, fomenta su energía masculina orientando su acción hacia ese objetivo.
5. Encontrar un equilibrio en las relaciones
Es necesario esforzarse por tener buenas relaciones, para equilibrar las energías. Con este fin, es preciso ser empático y compasivo (lado femenino), pero también es imprescindible poner límites y tener una dirección clara (lado masculino).
6. Practicar la gratitud
Ser agradecido favorece el flujo de la energía femenina al estimular la empatía, la receptividad y la conexión. De igual modo, potencia la energía masculina al incentivar la claridad, el enfoque y la acción.
Ritual diario para balancear la energía femenina y masculina
Teniendo en cuenta varios de los puntos anteriores y las propuestas de algunos seguidores de estas nociones energéticas, te ofrecemos un ritual diario que puedes usar para armonizar las energías. Intenta realizarlo siempre a la misma hora.
1. Prepara el lugar
- Elige un espacio de tu casa que sea tranquilo y donde no te interrumpan otras personas o estímulos ambientales.
- Enciende una vela aromática para simbolizar la luz y la tranquilidad.
- Si quieres, decora el lugar con elementos que representen lo masculino o lo femenino, pero sin saturar el ambiente.
2. Conecta con tu interior
- Siéntate en un cojín de meditación o en una silla y cierra tus ojos.
- Respira varias veces de manera profunda y con tu diafragma.
- Visualiza una luz que se expande, como una onda, desde el centro de tu pecho hacia las diferentes partes de tu cuerpo.
3. Repite un mantra
- Puedes decir «soy un ser completo y equilibrado».
- Repite el mantra de manera pausada y al ritmo de tu respiración.
4. Ejercicio artístico y físico
- Durante unos minutos dibuja, escribe o haz cualquier otra actividad artística de tu gusto.
- Después, realiza un poco de ejercicio físico, como estiramientos, yoga, etc.
5. Agradece
- Piensa en la experiencia que has tenido y agradece.
- Apaga la vela y recoge los elementos que hayas usado.
Energías necesarias para el desarrollo personal
Durante la lectura, aprendimos que armonizar ambos lados es necesario para el crecimiento individual. Más allá de los roles de género, estas energías son aspectos generales y universales del ser humano que no tienen nada que ver con la identidad sexual.
Al promover el conocimiento de estas fuerzas e incentivar su equilibrio mediante el mindfulness, el arte y el deporte, las personas abren nuevas rutas para conocerse y conectar con el mundo y los demás. De manera que la energía femenina y la masculina no solo tienen repercusión individual, sino también colectiva.