Los 3 consejos de una psicóloga para frenar un ataque de ansiedad

Un ataque de ansiedad puede ser abrumador y asustar.  Aparece de forma repentina y se siente como una avalancha súbita de miedo o angustia que crece en intensidad. Lo normal es que se acompañe de síntomas físicos como palpitaciones, falta de aire, mareos o temblores.

Los problemas de ansiedad son uno de los trastornos de salud mental más frecuentes. Quien la experimenta vive como un preocupación excesiva aspectos rutinarios del día a día. A veces un pensamiento o una situación dan pie a una pérdida total de control, dando lugar a una crisis.

La psicóloga, Bérénice Lefebvre está especializada en la gestión del estrés y la ansiedad. En su cuenta de Instagram comparte consejos para ayudar a sobrellevar estos aspectos. En uno de sus posts, ofrece 3 consejos para hacer frente a los ataques de ansiedad y detenerlos lo antes posible.

Acepta tus sentimientos

Estas sensaciones «son incómodas y desagradables, pero cuanto más luches contra ellas, más tiempo persistirán».

Lo normal es huir de aquello que asusta o angustia. Sin embargo, «al evitar estás enseñando a tu cerebro que la única forma de manejar situaciones difíciles es huyendo en lugar de afrontarla, lo que refuerza nuestra necesidad de evitar», coincide la catedrática de psiquiatría de Harvard Luana Marques. «Cada vez que evitas, te sientes un poco mejor, pero sentirte mejor y estar mejor no es lo mismo».

«Si no aprendes que lo que se dispara cuando estás ansioso es una falsa alarma» matiza Lefebvre «entonces te quedarás atrapado en esta espiral para siempre».

Habla contigo de forma concreta y realista

Cuando empieces a sentir y pensar cosas catastróficas, párate y pon los pies en el suelo. Puede parecer muy real pero en el fondo está en tu cabeza, asegura la psicóloga.

«No, no vas a tener un infarto, simplemente tu corazón late más deprisa. Tampoco te vas a asfixiar, estás hiperventilando. Y en general no vas a morir, sólo sientes náuseas, mareos, etc. Cuanto más concreto puedas precisar lo que te está pasando, menos ansiedad sentirás».

Quédate donde empezó la crisis

Lefebvre aconseja permanecer donde estás para sentir la ansiedad que se desvanece.

«Si abandonas el lugar donde empezó tu ataque de ansiedad, asociarás ese lugar con el ataque», sostiene. «Al permanecer en la situación en la que estás, aprenderás que tu ansiedad disminuye y que tus peores escenarios no ocurren«.

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