Las jerarquías modifican tu manera de actuar

Las jerarquías son un aspecto biológico intrínseco al mundo animal y con ello, presente en la vida de los seres humanos.

La política, el estatus social, la empresa en la que trabajas, todo está organizado de manera que hay personas que, en cierto ámbito, tienen un poder o una responsabilidad superior sobre otras. Y esta jerarquía modifica la manera en la que te relaciones y tomas tus decisiones. 

Esta afirmación es el resultado de un estudio publicado por la revista Nature, donde se explica que el cerebro reacciona de una manera o de otra, en función de la jerarquía que le adjudique a la persona con la que vas a interaccionar.

Para comprobar esta hipótesis, los autores de la investigación han puesto a prueba a un grupo de ratones, a los que han dividido en jaulas en grupos de 4.

Los dejaron convivir para que se desarrollasen naturalmente jerarquías entre ellos. Después se les separo en parejas y se les puso a competir. Lo que ocurría es que la confianza y la mentalidad ganadora del ratón disminuía parcialmente cuando se enfrentaba al ratón alfa.

Estos resultados han sido medidos mediante el registro de la actividad cerebral de todos los ratones, de la corteza prefrontal medial (CPM), una parte relacionada con respuestas conductuales.

«Es la primera vez que hemos podido captar estos estados internos que conectan el rango social con el comportamiento», explica Kanha Batra, experto en neurociencia teórica de la Universidad de San Diego Estados Unidos y coautor del estudio.

Otro hallazgo importante para los investigadores ha sido el darse cuenta de que los ratones no solo respondía al orden jerárquico cuando escuchaban el pitido que daba comienzo a la competición, sino que eran conscientes en todo momento de quién era el ratón alfa.



La medalla no es siempre para el alfa

Lo que si es cierto es que, tal y como y explican en el estudio, también se ha atribuido una característica a algunos ratones denominada: mentalidad del ganador.

Es decir, algunos ratones, a pesar de ser de una categoría inferior, lograban arrebatarle la recompensa al alfa. «Al igual que a veces uno puede ser más competitivo y ser capaz de arrebatarle la última porción al jefe, un ratón subordinado podía tener la mentalidad ganadora y acabar venciendo», detalla la investigación.

Aunque cerebralmente la CPM de ese ratón le indicaba que se enfrentaba a alguien superior, esto no condicionaba la confianza en sí mismo para lograr la victoria. El grado de competitividad de estos ratones era lo que les alentaba, y no su rango, algo que ya ha sido probado en seres humanos. 

Por ejemplo, como explican en El Español, el estudio llevado a cabo por profesionales de la Medical University de Carolina del Sur, demostró que lograr una jerarquía social más alta era igual de importante para los seres humanos que el dinero y que, para obtenerla, eran capaces de ‘casi’ todo.

Para comprobarlo, midieron la actividad cerebral de 72 participantes mediante una resonancia magnética y se les hacía competir en un juego virtual contra contrincantes ficticios (aunque ellos creían que eran reales).

A estos jugadores simulados se les asignaban niveles y, cuando los sujetos pensaban que competían contra alguien de un nivel superior, se esforzaban mucho más, aunque ya les habían asegurado que cobrarían el mismo dinero, obtuviesen el resultado que obtuviesen.

Esta mentalidad del ganador hace entre ver que, pese al peso de las jerarquías, a veces la intención es más fuerte.

Deja una respuesta