¿Por qué se aíslan las parejas?

En algunas parejas, la experiencia individual de los dos en el plano social se empobrece, lo que lastra a la propia relación, que se vuelve mucho más vulnerable frente a las circunstancias.

Algunas personas responsabilizan al amor romántico de que muchas parejas opten por alejarse de su círculo social, pero la respuesta a esta pregunta requiere un análisis de mayor profundidad y especificidad.

Las parejas tienen diferentes niveles de riesgo de perder su red social. Entre ellos, parece que el mayor de todos es que los padres se hayan divorciado o bien haber crecido con un solo padre. Ahora bien, ciertos rasgos de personalidad, como el neuroticismo, también se identifican como factores de riesgo a veces, al igual que algunas circunstancias externas (por ejemplo, que ambos dediquen mucho tiempo al trabajo).

No obstante, a nivel general, cuanto más aislada esté una pareja, mayor es su insatisfacción



El aislamiento de las parejas

Hay parejas que, por elección o por su naturaleza reservada, prefieren no tener relaciones sociales, salvo por motivos profesionales o familiares. Algunas aceptan vivir así y en principio se adaptan bien a esa situación. Sin embargo, ¿hasta cuándo? ¿Puede una pareja sobrevivir si no se alimenta de relaciones con otras personas?

El primer punto importante que plantear es el tiempo de vida actual de la pareja. Si es una relación de solo unos meses, probablemente la explicación no sea la misma que si llevan varios años. A continuación lo vemos.

Parejas que llevan solo unos meses, a solar para consumir el amor

Al principio, una pareja quiere consumir su amor tan intensamente como lo siente. Cada separación parece insuperable, incluso cuando se produce para pasar tiempo con otras personas queridas. Entonces, prefieren quedarse juntos en casa, para ser libres de darse todas las muestras de afecto que quieran, sin preocuparse por lo que otros puedan pensar.

Es un momento en el que solo parecen necesitarse el uno al otro. Sin embargo, una pareja necesita construirse enfrentándose al mundo exterior. De hecho, el paso del tiempo implica que se realicen ajustes y se establezcan dinámicas en la relación.

Ahora bien, si no se confronta el mundo exterior con la pareja, la evolución de la relación queda limitada y restringida. Eso es así porque se reducen las situaciones susceptibles de fortalecer a la pareja, siendo el principal riesgo que se tarde demasiado tiempo en descubrir cómo es el otro en la relación con los demás, su familia y sus amigos.

La pareja encerrada en sí misma desde hace años es una pareja en peligro

La pareja establecida desde hace varios años que ha perdido toda relación social está en peligro. Se ha aislado, con lo que ha reducido su registro social, volviéndose mucho más vulnerable. Su círculo de apoyo ha disminuido y cualquier contratiempo serio sobre uno de los dos, hará que uno se apoye totalmente en el otro. Esto es así porque no cuenta con otras opciones sociales.

Esta dependencia suele terminar pasando una factura muy alta, ya que el desgaste se multiplica y el oxígeno puede llegar a terminarse. Incluso antes de la pandemia, algunas investigaciones evidenciaron que a las parejas que están socialmente aisladas les va peor que a las que están bien integradas en sus redes sociales.

Además, hay que destacar que un círculo social nutrido alrededor de la pareja enriquece la comunicación. Los temas de diálogo se diversifican y las experiencias indirectas permiten que los dos se enriquezcan.

Maneras de recuperar la vida social

Las relaciones funcionan mejor cuando las parejas coinciden en la frecuencia con la que quieren salir y asistir a eventos sociales o visitar amigos y familiares, pero pueden enfrentar dificultades cuando no están de acuerdo en este sentido.

  • Cuando los miembros de la pareja difieren en sus necesidades sociales, deben alcanzar un acuerdo si quieren evitar problemas. Ambos tienen que decidir con qué frecuencia y a qué reuniones sociales asistirán. Lo que queremos decir es que las buenas soluciones son solo aquellas que benefician realmente a los dos.
  • Una persona puede decidir asistir a un evento sin su pareja. Como dijimos antes, acumular experiencias en el apartado social de manera individual enriquece la relación, ya no solo en cuanto a conversación, sino también en cuanto a contactos.

Señales de alerta

Ya hemos enumerado varias razones por las que puede producirse un aislamiento y también hemos adelantado motivos por los que no es recomendable.

Quizás la situación más peligrosa es cuando esta isla la genera uno de los dos alrededor de la pareja, para manipularla o maltratarla, evitando así el riesgo de que pueda recibir apoyo. Al fin y al cabo, aislar al otro es una manera directa de hacerle más vulnerable.

No sabemos qué viene primero en situaciones difíciles: el problema o la falta de ayuda. Podemos sospechar que hay violencia de género cuando el perpetrador, que suele ser un hombre, quiere evitar que la pareja obtenga ayuda.

Los conocidos a menudo no se dan cuenta de que se han desarrollado problemas y episodios de maltrato. Siguen dando por hecho que la pareja está bien. El aislamiento de las parejas es siempre una señal de alarma cuando se produce una ruptura de una relación entre amigos sin motivo aparente.

Cristina Roda Rivera.

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