Cuando nos mueve la motivación intrínseca, dejamos de guiarnos por recompensas externas. En estos casos importa el trabajo bien hecho y esa inyección de satisfacción para la propia autoestima. Potenciar la motivación intrínseca supone empezar a disfrutar de aquello que nos proponemos sin buscar otra recompensa que el propio placer deSeguir leyendo